Tras la liberación de José Ignacio Salmo, el ex policía que la baleó y dejó en una silla de ruedas a Carla Lacorte en 2001, apelarán la decisión del juez de Ejecución Penal Federico Merlin. La presentación se hará hoy ante el Tribunal de Casación penal de la Provincia.
El agresor cumplía una condena de siete años que, si bien había sido dispuesta en 2010, recién comenzó a aplicarse en 2014 luego d que la Corte Suprema bonaerense ratificar el fallo. Así, el magistrado le otorgó el beneficio cuando apenas superó la mitad del período de la sanción.
“Como mínimo, pretendemos que se cumplan las dos terceras partes”, expresó, aunque se mostró escéptica debido a que consideran que existe “cierta animosidad con Carla por su militancia”, señaló la abogada de la víctima, Aída Bassi, quien remarcó que el dato llamativo tiene que ver con que la disposición se produjo varios meses antes de que se hicieran efectivos los plazos que permiten una salida anticipada.
“No cuestionamos los derechos de los presos a obtener libertad anticipada. Los estímulos no están en cuestionamientos educativos y laborales, sí la reducción a un policía que nunca se arrepintió y sostiene que cumplió con su deber”, relató en diálogo con El Termómetro.
De la misma manera, la letrada reparó en que Salmo accedió a una serie de ventajas que no tienen el resto de los reclusos y que, además, se trata de una persona peligrosa que no puede reflexionar sobre los actos propios” ya que “no tuvo ningún gesto” que demostrara lo contrario.
Frente a este escenario, después de 17 años del episodio que cambió la vida de la militante de derechos humanos, la expectativa está puesta en que la Cámara revise el fallo y “revea la libertad anticipada” que se le otorgó al ex agente policial.