La gobernadora María Eugenia Vidal envió este miércoles a la legislatura bonaerense tres proyectos de ley que comprenden la Reforma integral de la Justicia de la provincia de Buenos Aires, destinados a brindar mayor celeridad en los procesos judiciales. El paquete incluye la modificación de los códigos de Procedimiento Penal; Civil y Comercial, y Laboral. Durante su discurso en la Casa de Gobierno de la Provincia, Vidal mencionó que “queremos una justicia despolitizada, transparente, que llegue a tiempo y que ponga en el centro a la víctima, no al victimario”.
El gobierno bonaerense apuesta a una nueva Ley de Procedimiento Laboral a través del cual buscará tener juicios más rápidos y menos costosos, ya que las causas estarán a cargo de un juez y no de tres, como hasta ahora.
A su vez impulsa un nuevo Código Procesal Penal para garantizar la participación de la víctima durante el proceso judicial. La reforma busca que la víctima pueda conocer y participar en las decisiones que tome el juez a lo largo de todo el proceso, y que tenga voz en casos como otorgamientos de juicios abreviados, salidas transitorias o libertad condicional. Cuando los jueces no permitan participar a la víctima, los actos serán nulos. Entre otros puntos, la reforma intenta reducir la cantidad de recursos que puede utilizar un delincuente para evitar la prisión.
Respecto de la elección de magistrados el proyecto contempla que todos los que quieran ser jueces o fiscales tendrán que asistir obligatoriamente a la Escuela Judicial, a fin de lograr transparencia los exámenes orales serán filmados y se contemplará un orden de mérito para acceder a los cargos.
Mientras tanto, el gobierno provincial sigue trabajando en un nuevo Código Contravencional para cambiar el vigente que tiene más de 40 años. La presentación del proyecto será en junio y creará nuevas figuras y sanciones para resolver conflictos menores sin llegar a la aplicación del Código Penal y apuntará a la reparación del daño que compense a la víctima.
En octubre, además, se presentará un nuevo Código Procesal Civil y Comercial con el fin de agilizar y bajar los costos de los procesos, buscando más juicios orales que escritos para poder resolver más cuestiones en menos tiempo y con mayor contacto entre el vecino y el juez.
Además, desde la gobernación esperan que a fin de año se haga una presentación de un nuevo proyecto de la Ley Orgánica del Poder Judicial para contar con las dependencias que se necesitan donde hacen falta, eliminando aquellas que prácticamente no funcionan y determinando la cantidad y distribución de los juzgados según criterios de necesidad y no de conveniencia.
Para 2019 está previsto trabajar en la formación y capacitación permanente de los abogados, para asegurarles a los bonaerenses que quienes defienden sus derechos cuenten con una formación profesional adecuada.
La mandataria resaltó que «toda esta reforma fue hecha en conjunto con la Corte Suprema de Justicia de la Provincia, con la Procuración, el Colegio de Abogados, la Asociación de Magistrados, incluso con legisladores de distintas fuerzas” y pidió que la legislatura “haga los tratamientos en comisión que hagan falta y un rápido tratamiento y sanción».
Respecto a los magistrados, Vidal sostuvo que “que «tenemos jueces y fiscales que llegaron a esos lugares por influencia política o judicial y no por su propio mérito. No podemos mirar para otro lado si tenemos causas que tardan años, o si alguien es acusado de un delito grave como abuso puede estar diez años en la calle. Nos queda mucho por hacer para tener una justicia despolitizada, transparente, que llegue a tiempo y que ponga en el centro a la víctima, no al victimario».