En el inicio del paro de 48 horas impulsado para hoy y mañana por parte de los gremios docentes, el subsecretario de EducaciónTécnica de SUTEBA, Gustavo Lappano, destacó la medida de fuerza y remarcó que tanto el oficialismo como las seccionales opositoras coincidieron en llevarla adelante. Consideró que la protesta tendrá un elevado acayamiento en las dos jornadas.
“Tuvimos asamblea y las agrupaciones mayoritarias votamos la misma medida rechazando el 15 por ciento que ofreció el gobierno, el cierre de cursos, los cierres de escuelas, lo que fue para nosotros entrar en sintonía con lo que plantea el Frente de Unidad Docente. La medida de acción nos pone en conjunto, el gobierno intenta avasallar derechos y en esto no hay internas, es codo a codo”, sostuvo en diálogo con El Termómetro.
En este sentido, cuestionó el ofrecimiento de la administración de María Eugenia Vidal ya que “las proyecciones de inflación son arriba del 20” y criticvó la falta de convocatoria pese a que habían indicado que las negociaciones no esperarían a último momento.
“No podemos quedar congelados con un salario que va a quedar a la baja. Parece que la intención de Vidal fue todo el tiempo empujar a que haya paro. Estamos esperando desde el 30 de noviembre a que nos convoquen a discutir el salario y las condiciones de trabajo”, expresó.
De la misma manera, el sindicalista se manifestó en rechazo al rumor que corrió en los últimos días referido a la posibilidad de que desde el Municipio de Quilmes (así como también en Lanús) convocaran a voluntarios para asistir a los chicos en las escuelas durante las jornadas de protesta.
“La única facultad para designar a los docentes son las Secretarías de Asuntos Docentes (SAD) Es una política de gobierno que parece que el sistema educativo se aneja desde otro lugar: hay una estructura armada en función de la Ley de Educación”, precisó.
Por otra parte, como integrante de la CTA, se refirió también a la “avanzada contra las cooperativas” por parte del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación. Sostienen que la idea es desfinanciar a los entes ejecutores de los proyectos que realizan los cooperativistas.
“Reciben determinada cantidad de dinero y con eso hacen el proyecto productivo, el gobierno le quitó os recursos y le dijo que las prestaciones que van a seguir y que tienen que ir a terminar la secundaria en las escuelas que el gobierno de la Provincia está cerrando”, sostuvo y remarcó que es incierto todavía que va a pasar una vez que terminen los estudios.
“Ganan 4500 por mes y los deja en una situación de vulnerabilidad (…) En Quilmes son 150 las personas afectadas, no se sabe si deján de cobrar, lo único que está claro es que quieren desarticular a las organizaciones”, evaluó.