En los últimos días se conoció que el diputado de la UCR, Maximiliano Abad, será quién presida el bloque de Cambiemos en la Cámara de Diputados de la provincia de Buenos Aires. Desde Quilmes, ante un Concejo Deliberante ajustado, el oficialismo mira con preocupación el posible fortalecimiento del diputado Fernando Pérez.
Tras un acuerdo con el vice gobernador, Daniel Salvador, otro radical estará en la presidencia de bloque de Cambiemos en la Cámara de Diputados, lugar ocupado hasta ahora por el alfonsinista, Jorge Silvestre. A partir del 10 de diciembre, Maximiliano Abad, quién responde al sector de Ernesto Sanz se quedará con la presidencia de un bloque de 44 diputados.
En Quilmes, esta situación es vista con preocupación, ya que hay quienes temen en esta jugada un fortalecimiento del diputado provincial quilmeño, Fernando Pérez, que responde directamente a la estructura de Abad y se encuentra enfrentado al gobierno de Molina.
En el oficialismo hay preocupación por la nueva conformación del Concejo Deliberante local, donde Cambiemos cuenta con diez ediles, ya que los dos radicales que responden a Pérez continuarán con bloque propio. Además, en este marco comienzan a mirar con cierta cautela, cómo será el desembarco del ex jefe de gabinete de Quilmes, Guillermo Sánchez Sterli, en la legislatura.
La semana pasada, Pérez festejó su cumpleaños en la ciudad, y no pasaron desapercibidas ciertas presencias de peso, como la del propio Abad; la del intendente de San Isidro, Gustavo Posse; y la del diputado y presidente de la Comisión de Presupuesto, Marcelo Daletto.