Los rumores sobre posibles cambios de gabinete municipal para después de las elecciones de octubre incluyen a varias secretarias de la gestión Molina. Aunque la que genera las especulaciones más interesantes es la Secretaría de Gobierno, que dejará vacante el primer candidato a concejal de Cambiemos Guillermo Galetto.
La Secretaría dejó de tener un rol político con la tormentosa salida del radical Fernando Pérez de la gestión, y tomó un bajo perfil con la llegada de Galetto, pero la nueva configuración de gestión, que tiene a la Jefatura de Gabinete en un mero rol administrativo, potencia la posibilidad de que el Intendente tenga un “fusible” político en Gobierno.
Los nombres que más suenan para el cargo ocupan actualmente puestos relevantes en la gestión: el titular de la Agencia de Fiscalización y Control, Gonzalo Ponce; el Secretario de Educación y Cultura, Ariel Domene; y el presidente del Concejo Deliberante, Juan Bernasconi.
El nombre de Ponce fue el primero en aparecer, aunque no estaría dispuesto a dejar la Agencia tan fácilmente. El área de fiscalización tuvo una fuerte reestructuración en manos de Ponce, que incluyó hasta una mudanza de oficinas y la centralización de todas las áreas que le competen. Según trascendió, Ponce habría sugerido ubicar la Agencia bajo la órbita de Gobierno, o dejar a un hombre de su confianza al frente de la misma.
El otro nombre que aparece es el del presidente del Concejo Deliberante, Juan Bernasconi, a quien dentro de la gestión muchos lo reconocen con un perfil “más político” que a la mayoría de los funcionarios. El inconveniente para sumar a Bernasconi al Ejecutivo, es que por ahora es el único concejal de Cambiemos que tiene consenso para conducir un HCD donde el oficialismo no tiene ni tendrá una mayoría propia.
Por último, el nombre que sorprende es el de Ariel Domene. Radical, ex soldado de Fernando Pérez, y actual Secretario de Educación y Cultura, se fue transformando en una opción para el cargo en el último tiempo. Domene mantiene hoy una relación muy cercana con Galetto y sus ambiciones políticas no estarían satisfechas con el cargo que ocupa actualmente. Por otra parte, la gestión Molina sabe que designar a Domene en Gobierno no sólo destruirá cualquier posibilidad de acuerdo con el diputado Pérez y los ediles que le responden, sino que además alejará al otro sector del radicalismo que comandan Fernando Geronés y Oscar García, metiéndose de lleno en la interna de la UCR.
En este marco, se escuchan las voces de quienes dicen que lo menos nocivo para la gestión Molina es que el propio Galetto se quede en el cargo.