A tres días de que concluya la primera mitad del ciclo lectivo, todavía es una incertidumbre lo que sucederá con el receso de invierno. Mientras que el gobierno de María Eugenia Vidal sostiene que en las próximas dos semanas se recuperarán los días de clases perdidos por los paros, los gremios resisten y sostienen que la medida “es ilógica” debido a que ya les descontaron a quienes adhirieron a las jornadas de protesta.
“Es una resolución de este gobierno que improvisa, que lo único que sabe hacer es ajustar, pero sabemos que es impracticable porque los paros no fueron absolutos, totales y cuando empezaron los descuentos muchos volvieron a trabajar. Es un apriete para seguir avanzando y cercenando los derechos de los docentes”, expresó en diálogo con El Termómetro la titular de Suteba Quilmes, Débora Procaccini.
En el mismo sentido, indicó que “no hay claridad por parte de las autoridades oficiales, que no tienen certeza de cómo aplicar esta disposición”. Además, remarcó que en cada una de las escuelas ya se presentaron planes de contingencia dirigidos a recuperar los contenidos, con lo cual sería un contrasentido que deban asistir a los establecimientos luego del 14 de este mes.
En el caso puntual del distrito, adelantó que los gremios están evaluando manifestar expresamente su rechazo a partir de la presentación de un recurso de amparo.
Por otra parte, la dirigente sindical se refirió a la presentación para que se declare la emergencia edilicia y alimentaria en las instituciones educativas estatales quilmeñas debido a la crítica situación que muchas atraviesan.
“Venimos denunciando que la calidad (de la comida) es mala pero en los últimos dos años fueron drásticos los cambios en el tema del hambre de los pibes: el aumento es monstruoso, asusta. El informe de la UCA dice que seis de cada diez chicos son pobres en el país y eso se refleja absolutamente en Quilmes”, sentenció.
En sintonía, mencionó que hay muchos edificios escolares que tienen graves dificultades y puso como ejemplo el caso de la primaria 32 de San Francisco Solano, donde hace más de un mes no tienen suministro de gas.
“Nos dan fechas (para cumplir los arreglos) y no se cumplen. No encontramos soluciones y si no lo volvemos a poner en el tapete, no pasa nada”, reclamó.