Este martes en TTT dialogamos con el Premio Nóbel de La Paz, Adolfo Pérez Esquivel, quien formó parte del masivo repudio al fallo de la Corte Suprema de Justicia respecto al cual manifestó que “no existen las casualidades, es querer imponer una política de negacionismo en todo sentido”. En ese sentido sentenció “Pedimos la renuncia de los tres jueces porque no son independientes del poder político”.
Además manifestó que “la marcha fue única. Me llamó mucho la atención la cantidad de jóvenes, que no vivieron los mismo que nosotros, pero participaron junto a sus familias” y aseguró que «Se le marcó la cancha al gobierno. Se le dijo: No pasarán, acá no hay retroceso alguno».
Por otro lado, Pérez Esquivel repasó algunos de sus viajes por la región y resaltó la visita a Milagro Sala, detenida en Jujuy. Respecto al hecho manifestó que “hablar con Morales, es como hablar con una piedra” y aseguró que “es inaceptable que a Milagro se la haya condenado antes de juzgarla”.
Además repasó su viaje a las Islas Malvinas y contó que fueron recibidos con mucha hostilidad por parte de los ciudadanos de la isla. Asimismo se mostró preocupado porque “La base militar británica es la puerta de entrada desde Argentina y eso es sumamente grave» y contó que la canciller Malcorra ya está al tanto de la militarización de la isla, pero que le resta importancia al asunto. Contrariamente a la postura de la canciller, Pérez Esquivel aseguró que “Hay que fortalecer los acuerdos regionales para evitar el escenario de militarización del territorio de Amércia Latina”
Pozo de Quilmes
Este lunes el gobierno de la Provincia entregó la posesión del ex Pozo de Quilmes a la Comisión Provincial por la Memoria, en ese sentido, Pérez Esquivel, manifestó la necesidad de traspasar el órgano policial que aún funciona en el lugar, para que la Comisión tenga acceso a la totalidad del espacio.
«Aún no sabemos con qué nos vamos a encontrar cuando ingresemos en esas dependencias, pero crearemos un sitio para la memoria, un centro de vida” manifestó Pérez Esquivel y concluyó que “Los centros de memoria no son para quedar en el pasado, nos tienen que iluminar el presente. El derecho tiene que ser la base fundamental de nuestra sociedad».