La vivienda que el Municipio de Quilmes no quiso seguir alquilándole a Santiago Luna, chico que sufre mielomielingocele e hidrocefalia, operado 42 veces para poder vivir, sufrió varios destrozos y por lo menos tres intentos de ocupación desde principios de años. Acusan a los “trapitos de la zona” y falta de seguridad. La vivienda fue enrejada por los propietarios.
Hace poco más de una semana, la madre de Santiago planteó en la sesión del Concejo Deliberante, llevada a cabo en los Bomberos Voluntarios de Bernal, la necesidad que la Municipalidad alquile una vivienda para que su hijo pueda continuar con el tratamiento, ya que el contrato había vencido el año pasado y el propietario no quiso renovarlo, porque la gestión Gutiérrez nunca les pagó.
Sin embargo, el nuevo gobierno tampoco se hizo cargo de la situación y la vida del joven depende de ello. Luna tiene 23 años que padece desde muy chico mielomeningocele, una masa quística formada por la médula espinal que produce graves daños neuronales, entre ellos, hidrocefalia y discapacidades motrices e intelectuales.
Si bien la resolución podría estar cerca para Santiago, la comuna también descuidó al propietario. La gestión del “barba” Gutiérrez nunca terminó de pagarle el alquiler de la casa, cuando llegó el nuevo gobierno no hubo cambios y decidió terminar la relación que tenía con la Comuna.
Luego Santiago y su madre abandonaran el lugar tuvo que enrejalar y la puso en venta, porque, según denuncia, los “trapitos de la zona comenzaron a romper las ventas y el portón, con la intención de ocuparla y aseguran una falta de patrullaje, a 500 metros del Comando de Prevención Comunitaria de la bonaerense.
La vivienda pertenece a un reconocido médico en el ámbito local que desde hace años se mudó a un departamento y alquila su vieja casa.